¿Nos preparamos o no para un futuro de estabilidad?

El 2024 parece ser un año de transición. Un año atravesado por los ajustes en la economía y para esperar. Pero la rueda tiene que seguir en los próximos meses y sin dudas se deben poner sobre el debate, nuevamente, los problemas que atraviesa la gente. El Informante de esta semana ofrece algunas pistas.

 

Cronista: Todo es cautela, espera, incertidumbre, pero los problemas siguen y se agravan. ¿Cuál cree que debe ser el tema o los temas de fondo a tratar en Río Tercero?
Informante: El acceso a la tierra y la vivienda. Sin dudas.

 

C: ¿Y que tiene que ver el Estado allí?
I: Mucho. Si habla del nacional debe generar estabilidad y bajar la inflación para que regrese el crédito. Si nos referimos al municipal, de una vez por todas debe ponerse a trabajar en un plan de viviendas y crear las condiciones para el acceso a la tierra, al primer lote para que las familias pueden empezar a soñar con construir. Lo hace Corralito, Almafuerte, lo hizo Villa Ascasubi y Tancacha, y acá nada. Además debe generar una política urbana acorde a estos tiempos.  

 

C: ¿Pero usted se cree que es fácil poner en marcha una operatoria de este tipo? 
I: Por supuesto que no en estos meses. Pero hay que pensar hacia futuro cuando se logre la estabilidad. 
 

C: ¿Usted que tiene experiencia en el rubro, cómo lo haría?
I: Con algo de estabilidad, apelando al sector privado o a un trabajo mixto; que aporten los desarrollistas y el Estado. ¿Usted vio la cantidad de edificios y departamentos que se construyen?

 

C: Sí, ¿qué me quiere decir?
I: Que hay mucha plata en esta ciudad que se invierte y hay más todavía que espera por ahí, en el colchón. 

 

C: Es decir que hay posibilidades.
I: Claro que sí. A ver si avanza algo, alguna iniciativa privada como en los ‘90.