
La gestión del intendente Rubén Dagum organiza charlas y visitas de alumnos a la planta de GIRSU, con la idea de inculcar el manejo serio de los residuos urbanos, su separación y reciclado
Lo planteamos siempre en estas páginas y lo seguimos afirmando. Almafuerte está un paso adelante en la región. Siguiendo una clara política de Estado, la ciudad impulsa con fuerza la gestión integral de los residuos sólidos urbanos (GIRSU). Dentro del claro concepto de la economía circular, que ya está en marcha en Almafuerte desde hace años, la administración del intendente Rubén Dagum le abre las puertas de la planta de reciclado del centro GIRSU, a los alumnos de las escuelas locales, y les ofrece charlas sobre el tema. La idea es que los chicos sepan de qué se trata la gestión responsable de los residuos, cómo ayudar a reciclarlos, y avanzar en la separación en origen. Es decir tener en casa tres “tachos”, en uno colocar la basura inorgánica que proviene por lo general de restos de comida, en otro los inorgánicos que no se pueden recuperar, como papeles sucios, pañales y demás. Y en un tercero todo lo que pudiera ser utilizable, como vidrios, plásticos, madera, metales, telas, cartón y papeles.
Es muy fácil, solo hay que tomar conciencia y hacerlo.
En el plan municipal de Almafuerte, trabaja fuertemente el ingeniero Raúl Martina asesorando a la Subsecretaría de Medio Ambiente local.
En contacto con TIEMPO21, Martina dijo que se trata de una campaña de concientización, “para hacer de Almafuerte una ciudad mucho más limpia”.
“En esa dirección y de acuerdo a lo planificado por el Ejecutivo municipal, la idea es difundir cada vez más, el manejo responsable de los residuos desde el domicilio hasta su destino final”, dijo Martina.
La capacidad de los más jóvenes, interesado en convertirse en promotores ambientales de la Municipalidad, es importante en este plan.
“Nosotros visitamos colegios y grupos de estudiantes que están interesados en trabajar en la cuestión ambiental, le cambiamos la manera de ver sobre qué tienen que hacer con los residuos, y cerramos la inquietud con una visita a la planta de separación de los residuos domiciliarios que tenemos trabajando hace más de diez años”, explicó. La primera visita fue con un grupo de chicos del colegio José Manuel Estrada, de la orientación Ciencias Naturales. “Fue muy gratificante, satisfactoria y se llegaron a la planta en una bicicleteada desde el colegio. Rescato una reflexión de los chicos que nos visitaron: dijeron ‘hasta que no conocimos la planta creíamos que todos los residuos se mezclaban y que todo esto era verso’. Y en realidad no es verso, hay un compromiso del Ejecutivo municipal de separar. Lo que no se separa es basura, pero lo que sí se puede, pasa a ser materia prima para la economía circular”.
Martina reveló que la planta de GIRSU, en pocos años, será totalmente sustentable, ya que los mismos operarios generan la materia prima que luego el Municipio coloca a diferentes proveedores. Con el tiempo será un área sustentable 100%”, cerró.