
la situación es compleja por la pérdida de rentabilidad, según la Cámara de Combustibles de la Provincia de Córdoba
En el último año, de la mano de la baja de la actividad y el aumento de precios, las ventas de combustibles cayeron un 25 por ciento en la provincia. A eso hay que sumarle una pérdida en los márgenes de rentabilidad provocada por una combinación de factores que incluyen ingresos que no acompañan la marcha de la inflación y costos que sí se ajustan de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor.
En las próximas horas habrá un nuevo aumento, de entre el 2,5 y 3,5 por ciento, que será un nuevo golpe para los consumidores pero que no alcanzará para recomponer los márgenes de los estacioneros, según publicó Puntal.
Marisa Centenaro, presidenta de la Cámara de Combustibles de Córdoba, indicó que la coyuntura para el sector es sumamente difícil.
“Desde el último año, tenemos un acumulado que marca una caída del 25 por ciento. Entonces, vemos que a medida que el precio del combustible aumenta, los volúmenes de venta descienden.Todo eso, sumado a que el aumento de los precios de los combustibles no va siguiendo la inflación, sino que se sitúa por debajo, entonces la situación es complicada. Por ejemplo, a lo largo de este año tenemos un aumento de las naftas que ha sido de alrededor del 37 por ciento, mientras que la inflación ha sido de alrededor de un 90 por ciento. Y nuestros márgenes de comercialización están ligados al precio de venta. Por lo tanto, la rentabilidad del negocio de las estaciones viene siendo muy castigada porque nuestros costos fijos siguen la inflación. Por ejemplo, dos proveedores que para nosotros son muy importantes, como puede ser el costo de la energía eléctrica, la factura ha sufrido un incremento en el último año del 200 por ciento. Y en materia de aumentos laborales, que es una erogación muy significativa, el aumento ha sido de un 50 por ciento. Es decir, la evolución de los principales costos siempre está por encima del aumento del precio de los combustibles;entonces, nuestro margen de comercialización cada vez va disminuyéndose más mientras nuestros costos operativos van subiendo. El estacionero, en ese contexto, queda expuesto a una situación financiera muy complicada”, manifestó Centenaro.
“Las naftas subieron el 37% pero la inflación fue del 90”, dijo Centenaro.
La presidenta de la Cámara de Combustibles de Córdoba agregó que, a pesar de que el precio de la nafta significa un esfuerzo para los clientes, en realidad el costo del litro en el surtidor está todavía atrasado.
Las compañías petroleras se aprestan a aumentar cerca de un 4% el precio de los combustibles en todo el país a partir de mañana.