Para la Cámara de Farmacias de la provincia de Córdoba, el aumento en el precio de los medicamentos fue del 80%, lo que ocasionó una baja sustancial en las ventas del 25% en promedio.
Todos quienes hayan concurrido a la farmacia, se habrán percatado del fuerte aumento que sufrieron los precios de los medicamentos de todo tipo, productos de perfumería, higiene y pañales. No escapa el rubo al resto de las ofertas de mercado. Pero por tratarse de productos muy importantes relacionados con la salud de las personas, el tema adquiere una relevancia central.
¿Cuáles el panorama en Río Tercero? Según datos de la Cámara de Farmacias de la provincia, en los últimos dos meses el incremento promedio de los remedios fue del 80%, lo que implicó una baja en las ventas del 25%.
Osvaldo Ludueña, titular de la Cámara, señaló sin embargo que no se registran faltantes. “La industria farmacéutica de la Argentina es muy sólida, y hoy está garantizando la accesibilidad de los medicamentos a cada uno de los ciudadanos”, expresó Ludueña al noticiero Somos Río Tercero. “Es un factor muy importante a tener en cuenta. A través de la seguridad social y las obras sociales se le da accesibilidad al ciudadano, al paciente para que tenga la posibilidad de seguir sus tratamientos”, apuntó el farmacéutico de Río Tercero, propietario de una de las cadenas de farmacias más importantes del interior cordobés.
No obstante ello, el aumento tan pronunciado en los costos, ha ocasionado que muchas personas y familias eviten comprar medicamentos y recurran a buscarlos en la salud pública, tanto provincial como municipal.
“La situación es complicada, es compleja como en todo el resto de nuestra economía”, profundizó Ludueña. En general el aumento ha sido del 80% en diferentes etapas a los largo de estos 60 días. Pero Ludueña entendió que los incrementos están “muy por debajo” de otros rubros que han subido sus costos por efecto de la alta inflación. “Igual el impacto en el bolsillo es fuerte y se siente”.
“La industria farmacéutica marca claramente una caída del 25 por ciento a nivel país. Algunas provincias tienen caídas de hasta el 40 por ciento. En el resto de los accesorios de las farmacias la caída es de entre 30 y 35 por ciento”, reveló el empresario.
La suba de los precios abarca a todos los medicamentos, desde los de venta libre más simples como antiinflamatorios y antigripales, hasta los destinados a tratamientos complejos.
El aumento tan pronunciado en los costos, ha ocasionado que muchas personas y familias eviten comprar medicamentos y recurran a buscarlos en la salud pública, tanto provincial como municipal.
PAMI, la obra social de los jubilados y pensionados de Argentina, es la que tiene mayor demanda de medicamentos. Y los precios son alrededor de un 50 por ciento más baratos que para el resto de los pacientes afiliados a otras obras sociales. Además, el 90% de los remedios tienen un descuento del 100 por ciento. Es decir que son de entrega gratuita para los abuelos afiliados. “Por el momento hay una accesibilidad garantizada para ellos”, señaló Ludueña, siempre y cuando -aunque no lo dijo- el PAMI no se atrase demasiado con los pago a las farmacias.
“El pago del PAMI como prestador, es absolutamente correcto”, dijo sorpresivamente Ludueña.
En un informe publicado por el diario La Voz, se advierte que en Argentina es alto el índice de consumo de medicamentos. La proporción aumenta conforme avanza la edad. El problema que advierten los especialistas es la excesiva polimedicación en adultos mayores.
Según el Observatorio de Salud, Medicamentos y Sociedad de la Confederación Farmacéutica Argentina (Cofa), los argentinos consumen en promedio 1,5 cajas de medicamentos por persona al año.
