Varios medios se hicieron eco del fracaso de una de las listas que pretendía competir en el Centro Comercial para su recambio de autoridades. El informante, un avezado dirigente institucional nos da si visión.
Cronista: ¿Qué siente que no va a poder votar en el Centro Comercial e industrial?
Informante: Frustración.
C: Suponía que estaba contento por una de las listas.
I: No, de ninguna manera. Me hubiese gustado votar y ganarles en las urnas.
C: ¿Qué fue lo pasó?
I: Le explico. Se habían presentado dos listas. Una que llevaba como presidente a Agustín Hesar, y otra a otro empresario: Sergio Jurado, dueño de una ferretería.
C: ¿Y?
I: Espere, no sea ansioso. Muy simple. Una de las listas, la de Jurado, no cumplía con las formas que el estatuto prevé para competir. A último momento se bajaron tres o cuatro cargos y la lista quedó incompleta y sin tiempo para arreglarla y volverla a presentar. Y entonces la otra, que cumple con todo lo legal, quedó en carrera y se proclama en la asamblea. Fin de la historia.
C: No, no es fin de la historia, porque tengo datos que había mucha política en el medio.
I: Sí puede ser. La lista de este chico Jurado estaba integrada o influenciada con algunos referentes o militantes cercanos al peronismo. Y la otra tenía como lobbista al legislador Peirone, opositor al PJ en la provincia y en el departamento.
C: ¿Ganó Peirone entonces?
I: No, nada que ver. Por encima del componente político, una lista estaba sólida, con importantes empresarios, y siguió adelante. Y la otra muy débil con muchos líos internos.
C: Me dicen que había un personaje muy resistido.
I: Sí claro. Uno que hasta ayer fue vicepresidente del CeCISA y exconcejal, que pretendía seguir haciendo política. Un filo kirchnerista que afortunadamente se va a su casa. Todo mal. Lo interesante del caso, que es cambia la conducción por una que promete mayor profesionalismo. Y se va una comisión muy ineficaz.
